Bombas de champiñón

¡Hola!

Hay un consejo de Arguiñano que creo conveniente recordar a la gente: cuando tengas invitados a comer prepara una receta que ya tengas bien probada; y es que los experimentos en ocasiones funcionan y en otras se puede (exagerando un poco) mascar la tragedia. El caso es que no siempre he seguido el consejo, aunque por fortuna he ido obteniendo resultados positivos, o eso, o los comensales me engañaron para no herir mi orgullo de chef de andar por casa.

Y en un uno de esos experimentos me dio por probar con unas bombas de champiñón, que os traigo en esta ocasión:

Ingredientes:

• 500 gr de champiñones
• 2 ó 3 patatas
• 3 dientes de ajo
• Un puñado de perejil
• 1 huevo
• Queso para rallar

Comenzaremos picando unos 3 dientes de ajo y un puñado de perejil. Lavamos bien para quitar la tierra de los champiñones y los cortamos en 4 partes cada uno.

Pelamos las patatas y las limpiamos, las troceamos en partes similares y las ponemos en agua hirviendo con un poco de sal, las tendremos en el agua al fuego durante unos 15 minutos hasta que estén blandas.

En una sartén ponemos un poco de aceite de oliva, cuando esté caliente añadimos los champiñones y un poco de sal, removiéndolos de tanto en cuanto. Cuando los champiñones empiecen a soltar su propia agua añadimos el ajo y perejil y los mezclamos bien para que queden repartidos uniformemente. Cuando se evapore el agua de van soltando los champiñones tendremos que añadir un poco de aceite e ir removiéndolos, los cocinaremos hasta que estén a nuestro gusto.

Las patatas las pondremos en un bol, si tenéis pasapurés las podéis hacer pure si no enteras. Añadimos un huevo, pimienta y sal y queso rallado. Como al ir a comprar no encontré parmesano (que era el que quería hacer servir) he utilizado Old Amsterdam y también ha quedado bien rico. Con un tenedor aplastamos bien las patatas a la vez que mezclamos bien todos los ingredientes.

Ahora es cuando tener algo más de arte del que yo dispongo me iría bien, ya que hay que montar las bombas. Se trata de coger con una cuchara la pasta que hicimos con la patata, poner en medio unos champiñones y envolverlos con la patata dejando forma de bola y disponiéndolos sobre una bandeja de horno (cubierta con papel de horno, mejor), por encima de cada bola formada añadimos un poco de queso rallado y al horno a 180º C durante 25 a 30 minutos.

¡Espero que os haya gustado!